viernes, 17 de junio de 2016

LA QUIMIOTERPIA


Comenté al crear el blog, que el orden de contenido y el propio contenido, no sabía muy bien cómo iría.
Es difícil asimilar que tienes cáncer, luego tener la ida de olla de querer compartirlo en un blog, y encima crear contenido más o menos interesante.
El mes de mayo pasó, y yo sin mi entrada mensual.
Pero yo sé que me perdonáis, más o menos me vais viendo en instagram y ya sabéis que todo va genial.

Un tema pendiente que tenía para publicar, es el de la temida quimio.
Hoy os voy a hablar de mi experiencia.

En mi caso, la quimio fué previa a la operación, ya que el tumor era grande. En estos casos, la quimio se llama quimio neoadyuvante, porque se hace primero.
Las ventajas de esta quimio, según me explico el médico, es que tienes una prueba objetiva de que la quimio realmente está funcionando. Si el tumor reduce y la quimio le está afectando, imagínate lo que hace con los micro micro micro "lo que sea" que se hayan podido escapar por ahí! Los mata!

Así que aproximadamente unas cuatro semanas después del diagnóstico, empecé la quimio. Yo quería empezar cuanto antes, pues hasta el momento solo me habían estado haciendo pruebas y pruebas, pero aún no había empezado a poner remedio a mi enfermedad.

El primer día que fuí a quimio, iba mentalizada y contenta porque empezaba a curarme.
Me vestí estupenda.
Sí sí. Con un par.
Cada día que he tenido que ir a quimio, me he arreglado como mejor he podido, me he maquillado, y he ido dispuesta a que ese veneno hiciera su mejor efecto.

Al llegar a la habitación dónde iban a administrarme la medicación....pffffff.....ahí sí hubo un bajón importante....aun y el convencimiento de que eso era lo que necesitaba.
¿Por qué? Pues porque en ese momento fué como darme cuenta que estaba enferma y que la cosa iba en serio
También tenía muchos nervios por ser algo nuevo. Porque aquí cada pasito que vas dando es algo desconocido, y te asusta. Normal.
Las enfermeras del Hospital de Día, un encanto. Me tranquilizaron, nos explicaron un montón de cosas sobre la quimio y sus posibles efectos secundarios, y empezamos la primera sesión!!

Y digo empezamos, en plural, porque mi marido ha estado ahí conmigo en cada una de ellas. Hemos visto pelis, series, dormido, hablado... e incluso por simpatía creo que a veces incluso ha tenido él efectos secundarios.



Finalizada la primera sesión, me recomendaron ponerme un PICC, un catéter externo conectado al sistema venoso central, para poder administrar la quimio sin problemas y no machacar mis finas venas. Esto del PICC os lo explico en otra entrada.

Así que un par de días antes de la segunda sesión de quimio, otra vez nervios mil para poner el PICC, pero superando pruebas y orgullosa de mi misma.

Con el PICC la quimio estubo chupada. 
Ya no me tenían que pinchar, porque todo iba a través de ese aparatito.
Recomendable al 100%.

El tratamiento de quimioterapia se ha dividido en dos partes, una primera medicación combinada conocida como AC y que se administra en 4 ciclos cada 3 semanas, y la segunda medicación Taxol, que estaba prevista en 12 sesiones semanales.

Cada tipo de quimio, tiene sus efectos secundarios propios.

Con AC, los efectos con que yo me encontré fueron:
- Caída del cabello y pelo corporal
- Náuseas y malestar general dos o tres días después de la administración
- Llagas en la boca
- Bajada de defensas

Con Taxol, los más destacables:
- Agotamiento
- Dolor articular y muscular
- Adormecimiento de los dedos de las manos y pies


En los casi seis meses que duró el tratamiento de quimioterapia, vi visiblemente reducida mi vida social.... ya que para evitar contagios indeseados:
- Nada de aglomeraciones (sitios con gente, cines...)
- Nada de llevar o recoger a los niños al cole
- Nada de pasar frío
- Nada de reuniones familiares ni de amigos si hay alguno con virus
- Nada de contacto con gente enferma
- Nada de visitas al hospital a no ser que fuera para mi

Y aún y así acabé unas cuantas veces en urgencias, dos de ellas con bajada de defensas que requirieron ingreso e inyecciones para subir defensas.

Después de la séptima dosis de Taxol, a los dos días empecé con fiebre.... y otra vez ingreso de tres días. Me mandaron a casa, y a los dos días otra vez fiebre, llegando a 39,1 lo que me supuso un nuevo ingreso, y esta vez, eteeeernoooo porque la fiebre no se iba y estuve ingresada 10 días.
Fué duro, aunque los médicos estaban tranquilos, yo no. No veía el final a eso.
Me hicieron pruebas mil, de sangre, de orina, TAC, radiografías.... y todo salió bien.  Incluso me retiraron el PICC no fuera que mi cuerpo estuviera haciendo un rechazo hacia él o empezara una infección en esa zona.
Todo salió negativo.
La fiebre remitió.
Y me fuí a casita!!!
Fiebre de origen desconocido.

Después de este susto, me pararon la quimio y avanzaron la operación.
El objetivo final de todo el proceso era la operación, así que no valía la pena poner en riesgo mi salud y la operación en sí, con una nueva dosis de quimio que pudiera mandarme dos semanas más al hospital.
Como ya habíamos visto en los diferentes controles que el tumor estaba remitiendo de forma excelente, ya se había demostrado que la quimio que me administraban era la correcta.
Por lo tanto, en caso necesario, después de la operación podían acabar de darme las sesiones pendientes.

Y os voy a decir una cosa.... no ha hecho falta más quimio!!!!!
El tumor había desaparecido al 100%!!!


Si te van a dar quimio debes saber que...

- Estar asustado/a es normal.
- Llorar es normal.
- Los procedimientos médicos "nuevos" no gustan, y eso también es normal.
- Aún y todo lo expuesto en los puntos anteriores... ten muy claro que el veneno que nos administran es para bien.
- Los efectos secundarios de la quimio son diferentes para cada medicación. Y aún y administrarte la misma medicación que a alguien que conozcas, los efectos secundarios van a ser distintos o con diferente intensidad, pues cada cuerpo lo acepta de forma diferente.
- No asistas solo/a a tus días de quimio, por más súper bien que lo lleves. Mucho mejor compartirlo con alguien que lo haga más llevadero y pueda echarte un cable si no te encontraras bien.
- Déjate mimar y cuidar.
- Si en el hospital coincides con alguna otra persona que está pasando por lo mismo que tu, dedícale una sonrisa y un "hola", se agradece mogollón.
- Sigue las instrucciones que te den tus enfermeras y médicos. Infórmales de todo lo que tomes cuando te pregunten. Hay algunos complementos o medicaciones que podrían interferir de forma negativa en tu quimio.
- Y sobretodo, TU ERES TU PRIORIDAD. La quimio dura unos meses, y después ya recuperarás poco a poco tu normalidad. Por lo tanto, si no se puede ir a una comida, no se va. Si no se puede ir a una reunión, no se va. Y así con todo. Nadie se va a enfadar. Y si lo hacen, tendrán dos faenas, enfadarse y desenfadarse. Lo más importante es que te pongas bueno/a, y para eso debes estar en el número 1 de tu propia lista de prioridades.


En este momento ya hace tres meses que terminé la quimio, dos meses que me operaron, y he empezado las primeras sesiones de radioterapia y el tratamiento hormonal.
Me quedan muchas cosas por explicaros, poco a poco.

Un beso a todos.
Compartir todo esto, lo está haciendo mucho más llevadero.