Uno de los efectos secundarios de la quimio creo que más temidos, es el hecho que te digan que se te va a caer el pelo.
Vale, sabemos que es una cosa temporal, que pasada la quimio vuelve a crecer... y que sale diferente, más fuerte si cabe y bla-bla-bla.
Pero cuando lo tienes que pasar, asimilar y cortar es un proceso que requiere su tiempo.
Yo llevaba la melena hasta más de media espalda... así que en cuanto supe ya el diagnóstico definitivo y tratamiento, me fui a la pelu para hacerme las mechas.
Llevaba el pelo ya un poco castigado del verano, y de aquí a que me tocara la primera quimio, y se me cayera el pelo, aun faltaban unas 5 semanas.
Y claro, una puede estar enferma... pero coqueta y presumida sigo siendo!
Así que yo ni corta ni perezosa que me fui decidida a hacerme mis mechas rubias.
Sí... lo sé... os he estado engañando todo este tiempo! Lo mío es rubio de bote! Solo fuí rubia natural hasta los 10 años.
Pues eso, que una vez hechas las mechitas, mi peluquera, que me conoce ya de hace mil años, muy acertada me recomendó cortar el pelo ya un poco más corto.
Así que aunque estuve a punto de echarme a llorar a la que vi las tijeras, fuí fuerte, y le hice caso.
Con mi corte nuevo, con el que me sentía estupenda, fuí a mirarme el tema "peluca", a ver qué había en el mercado.
La verdad es que la cosa esta bastante acertada... pero yo me sentía disfrazada de mi misma.
Así que decidí que NADA DE PELUCA.
Total... la llevaría solo para salir a la calle, y yo por casa me continuaría viendo pelona allí donde me mirara.
Así que como soy muy amante de los gorritos y los foulards, pensé que estaría estupenda con ellos.
Me costó mis días de no dormir... soñar con pelucas... y tener la duda de si había tomado la mejor decisión. Me reservé el derecho de cambiar de opinión también, porque total, en una semana te la tienen lista.
También consulté a otras mujeres que han pasado por esto, y tenía las dos versiones, las que se hicieron y estaban encantadas, y las que se hicieron peluca y no se la pusieron jamás.
Pero cada día que pasa, estoy más convencida de que tomé LA MEJOR DECISIÓN PARA MI.
Esto es una cosa muy personal, y cada uno debe llevarlo como mejor se sienta.
Eso sí, me fuí a hacer gafas nuevas!
Unas así más fashion, acorde con mi nuevo look más radical.
Montura negra. Hace años que las llevo así y son las que más me favorecen.
Tal como nos habían dicho, a partir del día 14 desde la primera quimio, el pelo empieza a caer.
Y fué como un reloj!
No se caía a mechones... pero si me pasaba la mano por la nuca, me caían MUCHOS, y cuando digo muchos, son muchos.
Así que decidimos que al día siguiente, me cortaría el pelo en familia.
Mi marido, que es super solidario, ya se había rapado el pelo solo saber el diagnóstico.
"-Para que te vayas acostumbrando y veas que no pasa nada", me dijo.
Yo es que me lo como!!! A besos!!!
Mis tres hijos mayores ya se habían organizado, y buscado peinados que hacerme mientras iban cortando. Estaban los tres entusiasmados! Bueno... y mi marido que era el encargado de dar el toque final con la moto... ni os cuento!
Así que la tarde del "Dia D", le expliqué un cuento a Jan, que el pobre con 3 años, pensé que no entendería nada.
Le expliqué un cuento que ha escrito Vanessa Nueda, del blog
El Crep de Mi Vida, valiente luchadora donde las haya. Es un cuento monismo, que es descargable en formato .pdf en catalán y en castellano, y que se puede imprimir y colorear. Lleva por título
"Las aventuras del Cáncer", y lo podéis encontrar en la barra lateral de
su blog si lo miráis desde el ordenador, o en la parte inferior si lo miráis desde el móvil o tablet.
Pues ya con todo listo y Jan convencido de que mamá se convertiría en una valiente pirata, cenamos... y después de cenar, sesión de peluquería.
Empezó Noa, que me hizo media melena recta.
Luego Sol que me hizo un corte a lo "casco" y muy corto de mi lado izquierdo.
Después Max, que le tocó cortarlo cortito cortito, para que luego me pudieran pasar la moto sin problemas.
Jan, que hizo un corte simbólico.
Y por último, mi marido, que yo creo que se lo pasó en grande rapándome!
La verdad es que me dejó el pelo perfecto.
Os dejo unas fotos, porque esto a parte de explicarlo, se tiene que ver.
Como dice mi amiga Clara, valiente luchadora también, y que me ha dado un soporte moral brutal:
"SOMOS MUCHO MÁS QUE NUESTRO PELO"
Yo me siento estupenda con mi nuevo look:
